Discuten desarrollo de los biobancos en Costa Rica

·         Consentimiento informado y comités de bioética son claves

William Mora M.
wmora@conicit.go.cr

Otras condiciones favorables son la existencia de grupos muy longevos y la altísima disposición de los habitantes a participar en la investigación biomédica.

Aunque transitar por el país significa enfrentarse a carretas y caminos en malas condiciones, según la investigadora, en Costa Rica aún se puede llegar con seguridad a regiones muy alejadas para ejecutar los estudios clínicos y observacionales.

La existencia de una excelente comunidad científica, así como profesionales con una sólida formación bioética también se consideran factores positivos.

Estudios fundacionales

En su conferencia titulada "Tres décadas de investigación en la genética de los trastornos mentales en Costa Rica", la Dra. Raventós resaltó el aporte del CIBCM, de la UCR, a los estudios en epidemiología genética de relevancia internacional.

En este ámbito enmarca las investigaciones realizadas por el equipo encabezado por el Dr. Pedro León Azofeifa, que en la década de los 90 lideró el proyecto de la sordera de los Monge en Cartago, cuyos alcances consolidaron el centro.

Esta investigación permitió al país desarrollar experiencia en el campo bioético para atender las demandas de las instituciones proveedoras de fondos como fue el Instituto Nacional de Salud (NHI, por sus siglas en inglés) de Estados Unidos.

De la misma forma, según el recuento de la Dra. Raventós, por primera vez se transfirieron muestras biológicas humanas desde Costa Rica a la Universidad de California, Berkeley. "En aquel momento la forma de transferirlas fue que yo las llevara en la valija cada vez que iba a dar seguimiento al estudio y efectuar experimentos que, en ese entonces, no podía realizar acá", dijo.

La investigación de la sordera de los Monge hizo posible identificar el primer gen localizado en el mundo para una sordera no sindrómica (pérdida auditiva que ocurre sin otros síntomas); fue por esta razón que el Dr. Víctor McKusick (considerado pionero de la genética moderna) lo presentó en febrero de 1992 tanto en el Congreso Americano de Genética Humana como en la prestigiosa revista Proceedings of the National Academy of Sciences de Estados Unidos.

Desde ese momento empezaron a llegar ofertas de colaboración dadas las características del país para llevar a cabo proyectos epidemiológicos en genética humana.

Producción científica

Durante estas tres décadas, el CIBCM ha realizado múltiples investigaciones que abordan temas complejos como el trastorno bipolar, la esquizofrenia, el abuso de sustancias, los trastornos de ansiedad, entre otros.

Dependiendo del estudio, según explicó la Dra. Raventós, en algunos casos se deben recoger muestras sanguíneas para extraer el ADN y el ARN. El ARN es muy inestable, por lo que en ocasiones hubo que improvisar un pequeño laboratorio en la cocina de las casas de los participantes o en la parte trasera del vehículo de la UCR.

La finalidad era encontrar diferencias en el ADN o en el ARN entre personas con un trastorno o condición y las que no lo tuvieran, porque eso sugería que esas diferencias causaban o aumentaban el riesgo de padecer esa condición.

"Sumando todas estas variantes de riesgo se alcanza algo que se llama el riesgo poligénico; pero este riesgo poligénico; además de no saber si es igual en poblaciones con ancestrías genéticas diferentes, es mucho menos importante, por ejemplo, para una cardiopatía que comer chicharrones, fumar y no hacer ejercicio. Entonces, sigue siendo más importante recolectar una buena historia clínica, porque también la genética no se puede modificar, pero los hábitos y condiciones de vida sí", comentó.

El grupo de investigadores de Epidemiología Genética del CIBCM ha publicado hasta hoy 97 publicaciones, siendo el periodo del 2006 al 2010 el de mayor producción (32 publicaciones). El 90% de los artículos aparecieron en revistas internacionales de prestigio. Los fondos para los proyectos en un 100% provino de fuentes públicas y de organismos sin fines de lucro.

Si bien la Dra. Raventós considera que la colección de muestras biológicas que tiene el CIBCM no tiene las características de un biobanco, sí mantienen políticas rigurosas para obtener el consentimiento informado, se tiene el control de un Comité Ético Científico y hay políticas de seguridad en el manejo de las muestras biológicas, así como de la información obtenida. 

Otra de las prácticas vigentes que considera de vital importancia es hacer co-partícipe a la población de las preguntas de investigación y de los resultados obtenidos en las investigaciones. "En muchos casos hemos participado con ellos en la conformación de fundaciones y asociaciones de personas que tienen alguna condición estudiada", dijo.

Concretar un sueño

Para responder a muchas de las necesidades de investigación y las demandas bioéticas, la Dra. Raventós considera que el país debe con prontitud poner en marcha la creación de un biobanco humano, especialmente impulsado en una alianza entre el sector académico y la CCSS.

Iniciativas como los estudios de cáncer de cérvix, el Programa de Tamizaje Neonatal y la existencia del EDUS son antecedentes idóneos para concretar este sueño.

Un ejemplo de este tipo de iniciativas es el Biobanco Humano de Reino Unido que ya cuenta con más de medio millón de participantes, quienes mediante el consentimiento informado les dan acceso a investigadores empeñados en realizar investigación sobre enfermedades comunes en todas partes del mundo.

Desde la perspectiva de la Dra. Raventós, un biobanco humano nacional es un recurso esencial para el avance de la medicina moderna con potencial para mejorar la salud de los costarricenses.

Ticos a favor de donar datos para investigación genética

Los resultados de una encuesta publicada en febrero del 2021 en la Revista "Future Medicine, releva que un 89% de los 224 costarricenses entrevistados están de acuerdo en donar su información para fines de investigación. En contraste, un 34% se muestran en desacuerdo de donar datos para a organizaciones que realizan investigación con fines de lucro.

Figure 1. Distribution of willingness to donate genetic information for different research interests or categories.

https://www.futuremedicine.com/cms/10.2217/pme-2020-0113/asset/images/large/figure1.jpeg

Autores y fuente:  Gabriela Chavarría-Soley, Fernanda Francis-Cartín, Fabiola Jiménez-González, Alejandro Ávila-Aguirre, María José Castro-Gómez, Lauren Robarts, Anna Middleton & Henriette Raventós (2021). Attitudes of Costa Rican individuals towards donation of personal genetic data for research. PERSONALIZED MEDICINE. Published Online:12 Feb 2021 https://doi.org/10.2217/pme-2020-0113