Costa Rica pone escudo de 28 días para frenar incremento de infecciones
por covid-19
Solo nacionales y residentes podrán ingresar al país por aeropuertos,
puertos y fronteras terrestres, y serán enviados a aislamiento domiciliar con
orden sanitaria por 14 días; MEP suspende clases del 17 de marzo al 12 de abril
Ángela Ávalos. Hace 7 horas
A partir de la medianoche del 18 de marzo, solo podrán ingresar al país
nacionales o residentes por puertos, fronteras terrestres y aeropuertos. En las
diferentes puertas de entrada, como la terminal del Santamaría, el oficial de
Migración entregará una orden sanitaria para obligar a estas personas a
aislarse por 14 días. Foto: Lilliam Arce para GN.
Costa Rica puso un escudo de 28 días para frenar el incremento en el
número de infectados con covid-19, la nueva enfermedad respiratoria que hasta
este lunes mantenía en aislamiento domiciliar a 36 personas e internadas en el
hospital a cinco más para un total de 41 casos confirmados en solo 11 días.
Por esa razón, desde este lunes 16 de marzo se ejecutarán las siguientes
medidas, aunque el tiempo podría ser ampliado si fuese necesario:
1.
Se prohíbe el ingreso de extranjeros.
La medida empezará a regir desde las 23:59 (11:59 p. m.) de este miércoles 18
de marzo, y finalizaría el domingo 12 de abril a las 23:59. Aplica para puertos
marítimos, aeropuertos y fronteras terrestres. Se exceptúan las tripulaciones
de aviones, comercio y suministros.
2.
Los costarricenses y residentes que
ingresen deberán someterse a un aislamiento domiciliar obligatorio, durante 14
días. Recibirán para esto una orden sanitaria del policía de Migración.
3.
Suspensión de las clases en todos los
centros educativos públicos y privados del país, desde este martes 17 de marzo
hasta el 4 de abril. Los estudiantes regresarían a las aulas el lunes 13 de
abril, pues del 5 al 12 de ese mes es Semana Santa. Las transferencias
monetarias de Avancemos y Crecemos y las ayudas económicas del Instituto
Nacional de Aprendizaje (INA) se mantienen, y el servicio de comedor escolar.
Para dar apoyo a las mamás jefas de hogar con el fin de que puedan
trabajar, se mantendrán en operación las redes de cuido, con el fin de que las
personas adultas mayores no asuman esa tarea.
El presidente de la República Carlos Alvarado firmó este lunes un
decreto para declarar emergencia nacional con la finalidad de facilitar el
trabajo de coordinación entre todas las instituciones y la canalización de
recursos económicos.
Las medidas anteriores se suman a varias anunciadas desde la semana
pasada. Entre ellas, el incremento en el nivel de alerta, que pasó de verde a
amarilla el 8 de marzo para facilitar también la coordinación entre las
instituciones de emergencia.
Esa alerta amarilla se mantiene, pero en el transcurso de los últimos
días se han aprobado acciones correspondientes a una segunda fase, como la
promoción del teletrabajo en el sector público y privado, el cierre de bares,
discotecas y casinos, y la reducción a la mitad de los aforos en sitios como
cines, teatros y restaurantes. Hasta anoche, la Policía Municipal de San José
tuvo que cerrar 98 bares, 7 discotecas y 22 casinos por incumplimiento de la
orden.
"Queremos informar de que se mantiene el estado de alerta amarilla.
También el Gobierno de la República acaba de firmar el decreto de emergencia.
Esto nos dará facultades para realizar acciones más ágiles y necesarias para
proteger a nuestra población.
"Queremos decir que todo el esfuerzo que llevamos adelante es para
proteger a los costarricenses en su salud, a su familia y también para proteger
los empleos, trabajos y la economía del país", manifestó el mandatario en un nuevo
llamado al país para trabajar como equipo contra el nuevo coronavirus.
Alexánder
Solís, presidente de la Comisión Nacional de Emergencias (CNE), explicó que
Costa Rica toma estas medidas dos meses antes de un eventual escenario más
complejo, como el que les ha tocado vivir a países como Italia o China. En este
último país, se detectó el primer caso de covid-19, a finales de diciembre de
2019.
El propósito, reiteró, es prevenir un estado de alerta roja, que
sucedería solo si el número de enfermos sobrepasa la capacidad instalada en los
servicios de salud y sature hospitales.
El primer caso de covid-19 fue confirmado en Costa Rica el 6 de marzo. En 11 días, el número de enfermos pasó de una
persona a 41; al menos 15 de ellas estuvieron en países con transmisión activa
del nuevo coronavirus.
Costa Rica todavía tiene una ventaja: no se ha detectado transmisión
activa comunitaria; es decir, la aparición frecuente y sostenida de casos en
una misma zona.
Por ahora, se mantienen los mismos siete grupos de infección; incluido
el vinculado a un médico del hospital de Alajuela al cual estarían relacionados
alrededor de 20 casos de los 41 confirmados hasta ahora.
Estos enfermos viven en 17 cantones de cinco provincias: San José,
Alajuela, Heredia, Cartago y Guanacaste. Son 32 adultos, 5 adultos mayores y 4
menores, detalló el ministro de Salud, Daniel Salas. Hasta este lunes, se
habían descartado 615 personas.
La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) anunció que para este
viernes tendrá un centro único especializado en la atención de enfermos con
complicaciones por covid-19. Los detalles del sitio serán dados a conocer
pronto, prometió el gerente médico, Mario Ruiz Cubillo.
Quedarse en casa
El ministro de Salud, Daniel Salas, reconoció que en estos 11 días se ha
visto una tendencia al aumento sostenido en el número de casos. No se quiere
llegar a un aumento exponencial: muchos casos en poco tiempo. Esto depende
directamente de la respuesta de la gente a las medidas promulgadas por las
autoridades de Salud.
"Este incremento sostenido de casos es un indicador de riesgo para un
incremento exponencial. No vamos a esperar una semana para que eso suceda",
dijo Salas en su justificación de las nuevas medidas acordadas por el Poder
Ejecutivo y las instituciones de emergencia.
"Tenemos que ser más responsables, más solidarios. Va a haber muertes.
No podemos ver esto como gente que solamente pasa y a mí no me va a tocar. La
mayoría de la gente se va recuperar, pero pensemos en los que no lo van a hacer
tan rápidamente o del todo no lo van a lograr", sentenció Salas.
Un porcentaje importante de los casos confirmados viajó al exterior. Por
eso, nuevamente, Salas solicitó a la población no salir del país en estas
fechas.
"Ahora viene la Semana Santa. No salga, no es momento oportuno", dijo
Salas.
A pesar de todas las medidas, el ministro de Salud insistió en que no se
trata de paralizar el país ni aislarlo por completo.
"Si nos aislamos completamente y hacemos que ninguna actividad se pueda
hacer, lo que hacemos es condenar al país a una bancarrota que nadie quiere y
aquí es mantener ese balance.
"El virus va a seguir avanzando en sus cadenas de transmisión en el
mundo. Eso no se puede detener. No se trata de paralizar todas las actividades
que permitan que el país siga funcionando", reiteró el ministro.
Los comedores escolares permanecerán
abiertos, así como los centros de la red de cuido infantil.
En acatamiento a las indicaciones de la alerta amarilla, las autoridades
reiteraron la recomendación de que las personas trabajadoras sujetas a puestos
en los que puedan hacer teletrabajo, laboren desde el hogar, y los que tienen
factores de riesgo, apliquen distanciamiento social.
"Quisiera decirle a los costarricenses que como gobierno adoptamos estas
medidas para protegernos. Es momento de que nos unamos, que nos cuidemos, que si encontramos a alguien haciendo algo que no es
correcto, señalemos que no lo haga. Es para proteger a las personas, a los más
vulnerables, personas con factores de riesgo y adultos mayores", manifestó
Alvarado.
El mandatario insistió en la petición de permanecer en las casas para no
exponerse, "no generar tumulto, seguir las recomendaciones".
"Tengo toda la confianza de que en esta
situación, que es global, saldremos bien y saldremos adelante, pero para
hacerlo así tendremos que trabajar en equipo, dejar de lado nuestras
diferencias y unirnos", añadió.
El ministro Salas reiteró la necesidad de que todos los esfuerzos se
vuelquen a proteger a los más vulnerables como diabéticos, enfermos de cáncer,
personas con problemas respiratorios crónicos o cardiovasculares, así como
adultos mayores.
Asimismo, pidió implementar el correcto y frecuente lavado de manos; no
tocarse la cara sin lavarse antes las manos y mantener el distanciamiento social.
También aplicar el protocolo de estornudo y tosido.
"En nuestras manos está, son nuestro principal medio de interacción con
las cosas que nos rodean. Tenemos que no saludarnos de mano, no saludarnos de
beso, llegará el momento en que podemos hacerlo de nuevo", expresó.