Boletín Nº 204 - diciembre 2019
Científicos argentinos avanzan hacia el diagnóstico rápido de virus que
causan encefalitis
Posted by agenciacyta | Dic
16, 2019 | Ciencia, Destacadas, Salud | 0 |
Investigadores lograron crear un sistema de producción masiva de proteínas que permiten reconocer en poco tiempo
a los patógenos en muestras de suero. Y que también podrían ser la base de vacunas.
(Agencia CyTA-Fundación
Leloir)-. Los virus de la
encefalitis de Saint Louis (SLEV) y West Nile (WNV)
se encuentran entre los agentes infecciosos que causan enfermedades emergentes
transmitidas por mosquitos a humanos de mayor importancia a escala global. Y ya han sido detectadas en Argentina.
Ambas causan fiebre,
dolores de cabeza, náuseas, infección en el sistema nervioso central y, en
algunos casos, coma y muerte si no se tratan de manera oportuna. Y están causados
por virus del mismo género.
Ahora, investigadores
de la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) realizaron un avance que sienta
bases para el desarrollo de pruebas de diagnóstico específicas para los virus
SLEV, de la encefalitis de Saint Louis, y el WNV, del Nilo Occidental. "El
principal motivo de la necesidad de contar con un diagnóstico específico para
cada agente viral es poder tener un conocimiento preciso de la casuística en la
región, dado que tienen diferencias en su patogenicidad y en los cuadros
clínicos que producen", afirmó a la Agencia CyTA-Leloir
la doctora Sandra Goñi, responsable del estudio y
directora del Laboratorio de Virus Emergentes (LVE) del Instituto de
Microbiología Básica y Aplicada (IMBA), que depende de la UNQ.
En 2005 se registró
por primera vez en Argentina un brote de la encefalitis de San Luis, que
produjo 47 casos registrados en la ciudad de Córdoba, con 9 víctimas fatales.
"Los diagnósticos sirven no solo para elegir el tratamiento más adecuado para
el paciente, sino también para realizar estudios epidemiológicos", indicó Goñi, también investigadora del Departamento de Ciencia y
Tecnología (DCYT) en la UNQ. El brote
en Córdoba marcó un hito en la epidemiología
de este virus, ya que fue el primero en registrarse fuera de Estados Unidos desde que se aisló en St. Louis, Missouri, en 1933.
Tal como describe la
revista "Protein Expression
and Purification", Goñi y
sus colegas lograron crear un sistema para producir de manera eficiente y de
bajo costo una gran cantidad de proteínas NS1, presentes en ambos virus. Esas
proteínas se usan para que "pesquen" a los anticuerpos que puedan haber
originado las personas que estuvieron realmente infectadas con esos virus. "O sea, detecta la respuesta
inmune que el paciente puso en marcha
para defenderse del virus", explicó
Goñi.
Mediante técnicas de
ingeniería genética, los investigadores lograron multiplicar el volumen de
proteínas NS1 expresándolas en bacterias Escherichia coli y luego las purificaron. En un
siguiente paso, comprobaron que sueros humanos de casos positivos de SLEV y WNV
mostraron reactividad frente a las proteínas NS1 generadas o recombinantes, lo
cual habilita la posibilidad de usarlas en la detección de ambas infecciones.
Los científicos también demostraron que las proteínas producidas lograron generar una respuesta inmune
en ratones que puede "discernir" entre el virus
SLEV y el WNV, lo cual reafirma
lo observado previamente
con sueros humanos. "Debido a que los ciclos virales en cada país o
región pueden tener diferencias, estos métodos inmunológicos con proteínas
recombinantes pueden emplearse para monitorear la presencia de estos virus en
diferentes hospedadores", indicó Goñi
Del avance también participaron María Soledad
Collado, Marcelo Argüelles, Rosana Rota y Mario Lozano, de la UNQ; y Lorena Spinsanti, del Instituto de Virología "Dr. J. M. Vanella", que depende de la Facultad de Ciencias Médicas de
la Universidad Nacional de Córdoba.
Sandra Goñi, directora de laboratorio en el Instituto de Microbiología
Básica y Aplicada (IMBA), que depende de la Universidad Nacional de Quilmes e
investigadora del Departamento de Ciencia y Tecnología de esa misma
universidad.