Boletín CONICIT Edición Especial
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Estación
Nacional de Ciencias Marino Costeras:
Innovación
con producción de ostras impacta desarrollo de Zona Pacífico Central del País
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Instalaciones atienden investigación, capacitación, docencia y
acción social de diferentes centros e instituciones.
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Estación lidera proyecto país de producción de Ostras con gran
volumen de semilla y 9 grupos en producción.
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Cambio de mentalidad de emprendimiento y sentido de pertenencia se
evidencia en grupos de productores especialmente liderados por mujeres.
Silvia Arias
Comunicadora CONICIT
sarias@conicit.go.cr
La Estación Nacional de Ciencias Marino
Costeras de la Universidad Nacional
cuenta ya con casi 50 años de existencia liderando la investigación,
docencia, capacitación y extensión de la región Pacífico Central del país. Construida
por el programa BID-CONICIT su génesis responde a la iniciativa de la
Comisión Nacional de Ciencias del Mar y Pesquería, creada por el CONICIT en
1974, de explorar la posibilidad de crear un centro o laboratorio de
investigaciones en la zona costera y definir acciones para la coordinación
interinstitucional, para lograr un mejor aprovechamiento de las actividades
relacionadas con los recursos marinos.
En sus inicios,
administrativamente, el entonces Laboratorio de Investigaciones Marinas (LIM)
estuvo bajo la tutela del Ministerio de Agricultura y Ganadería y
posteriormente de la Universidad de Costa Rica. Posteriormente, la
Universidad Nacional y el CONICIT, firmaron un convenio en el cual se
establecieron las pautas relacionadas con su administración por seis años.
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La iniciativa de
producción de ostras busca el desarrollo de la acuicultura como una
alternativa sostenible para comunidades costeras, que contribuya a dinamizar la
economía local y mejorar la calidad de vida de la población.
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Desde 1996 la Estación Nacional de Ciencias Marino-Costeras
(ECMAR), es parte de la Facultad de Ciencias Exactas y Naturales de la
Universidad Nacional (UNA) y apoya una serie de proyectos de investigación,
capacitación y docencia, además de otros que impactan a la comunidad del Golfo
de Nicoya, manteniendo el interés de sus fundadores, de contribuir de manera
interinstitucional al desarrollo económico, social y ambiental de la zona. En
este sentido, el ECMAR se ha constituido como un espacio propicio para el
desarrollo de la actividad académica no solamente de la Universidad Nacional
sino de muchos otros centros e instituciones, siendo creciente el número de
proyectos que tienen en ella su base de operaciones.
Pudimos
visitar presencialmente la estación y conversar con los biólogos Gerardo Zúñiga
Calero, Coordinador del Laboratorio Nacional de Producción de Semillas de
Ostras y Ramiro Segura Méndez, Administrador de la Estación sobre el desarrollo
y el impacto que ha tenido ECMAR en la región y en la investigación.
Biólogos Gerardo Zúñiga
Calero, Coordinador del Laboratorio Nacional de Producción de Semillas de
Ostras y Ramiro Segura Méndez, Administrador de la Estación.
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La estación ha
albergado múltiples investigaciones, especialmente en su biblioteca registran
algunas realizadas por el Centro de Investigación en Ciencias del Mar y Limnología CIMAR
en los años ochenta y noventa "Tenemos gran cantidad de tomos de
investigaciones realizadas por el CIMAR de la Universidad de Costa Rica,
quienes recientemente han manifestado su interés por darle seguimiento a
investigaciones realizadas en esos años" afirmó el biólogo Ramiro Segura,
quien nos acompañó en un interesante recorrido por el lugar.
En los últimos
veinte años, se ha mantenido la política de promover y favorecer la
utilización más amplia posible de las instalaciones de la Estación por parte
de las instituciones costarricenses y de diversos sectores de la sociedad,
relacionados con el desarrollo sostenible e integral de la zona marino-costera.
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Para
Investigación, se dispone de dos laboratorios para Bioensayos, uno de ellos
húmedo, un laboratorio básico de química, dos laboratorios grandes
convencionales con áreas para el almacenaje de vidriería y reactivos o la
instalación de equipo de desinfección. Se dispone también de oficinas
individuales interconectadas a los laboratorios.
Enfatizando en
la visión humanística y de desarrollo regional de la Universidad Nacional,
los expertos nos cuentan que la estación no se exime de pensar primero en el
desarrollo de las regiones vulnerables del país antes de en la sostenibilidad
financiera.
"La Universidad
Nacional siempre se ha caracterizado por trabajar con estas comunidades y
estas comunidades no tienen como pagar un servicio, con el Programa de
Ostras, por ejemplo, nunca se ha esperado las comunidades paguen el servicio.
Recientemente, con incorporación de profesionales más jóvenes podríamos decir
que sí se tiene la tendencia de buscar la sostenibilidad económica de la
Estación. Hay muchos laboratorios en la Universidad que ahora sí van por la
parte de servicios y buscando una remuneración y esas cosas, pero esa no ha
sido la característica nuestra" afirmó Zúñiga.
Producción de Ostras
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Las 9 granjas
actualmente en producción de ostras benefician a gran cantidad de familias de
la región y venden el 100% de su producción al mercado local.
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Uno de los proyectos más
relevantes que la Estación realiza en la actualidad es la producción de
semillas de ostra, que ha servido para consolidar la actividad de producción de
ostras en comunidades marino costeras, con la finalidad de brindarles una
oportunidad para mejorar su calidad de vida. El proyecto es multidimensional
con gran cantidad de actores, que incluye tanto investigación como
implementación de tecnologías en maricultura para el desarrollo costero además
de formación, sensibilización, capacitación y seguimiento a los grupos
productores.
Sobre los inicios del proyecto, ya
hace varias decenas de años, don Gerardo comenta que "el proyecto nació con
investigaciones muy básicas en los años ochenta. Cuando se abrió la Estación de
Biología en Puntarenas, aproximadamente en el año 2000, empezamos a trabajar
con las comunidades de Costa de Pájaros y de Punta Morales, financiados con
fondos concursables del MICITT-CONICIT, de esta manera se adquirieron tanques y
los sistemas necesarios para la siembra en el mar y pudimos constatar que las
ostras crecían favorablemente".
Pero para cultivar ostras
necesitaban semillas y no podían comenzar la actividad sin esta ya que las
granjas de ostras funcionan manera similar a la agricultura. "Ya teníamos la
tecnología y el conocimiento que habíamos investigado en la sede de Heredia.
Cuando llegamos a Puntarenas pudimos escalar la producción de semillas; en
Heredia hacíamos un cultivo en 200 litros y cuando llegamos a Puntarenas lo
hacíamos en 2000 litros, es decir, aumentamos en un 100 por ciento la
producción de semillas justamente en los tanques que pudimos conseguir con los
fondos del Micitt-CONICIT", agregó.
Afiche con los actores
en el proyecto.
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Proceso productivo.
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Fue entonces cuando se inició la
producción de semilla que posteriormente no fuera suficiente debido a la
capacidad de producción del laboratorio (un millón al año), que no abastece en
su totalidad las necesidades de las granjas, que tienen un tamaño mínimo para
garantizar su factibilidad económica (necesitan sembrar cien mil semillas por
mes). Hoy en día el laboratorio en Punta Morales produce un millón de semillas
al mes, brindando oportunamente la cantidad de semillas que las granjas ocupan.
"En biología o acuicultura uno
busca las mejores aguas y estas no necesariamente se encuentran en el Golfo, no
es que sea lo mejor, pero es donde está la necesidad humana y social. Entonces
también eso es otra cosa que nos ha caracterizado, porque si nosotros
hubiéramos buscado este laboratorio donde instalarlo, tal vez hubiese sido allá
por Cabo Blanco, allá en la zona norte, donde las aguas son muy claras, pero
donde la necesidad está es aquí" afirmó.
El Proyecto cuenta con
un enorme trasfondo social, constituyéndose a su vez en la base para
potenciar una nueva actividad económica en el Golfo de Nicoya y el país.
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Aproximadamente
en el año 2002 ya habla ya de las primeras ostras producidas en el país que
podían entrar al mercado rompiendo paradigmas tanto por ser una actividad
comercial nueva como por representar una cultura culinaria no existente en el
país.
"En nuestro
país no somos comedores de ostras y comemos muy poco marisco. Entonces, con
esas primeras ostras que incursionan el mercado, topamos con la suerte de
encontrarnos unos chefs franceses que tenían un restaurante, que son muy
conocedores que saben cómo se preparan y cocinan las ostras entonces,
incursionamos con ellos al mercado y después de ahí ya vinieron los demás
proyectos que han ido avanzando y que se han ido colocando también en el
mercado" explica el coordinador del laboratorio de producción.
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Uno de los
principales problemas que se han tenido tiene que ver con el apoyo financiero
que se brinda a los diferentes grupos. "Lo primero que les piden es un
estudio de mercado, es un mercado apenas que es incipiente que se está
formando fuera del país, si hay un mercado internacional grandísimo, pero
nacionalmente va apenas creciendo" agregó.
Al día de hoy,
cuentan con ocho granjas produciendo en el Golfo de Nicoya y una en El jobo
de la Cruz, en la zona norte cuya producción total es colocada. Este último
grupo ha sido financiado por el INDER que también financió la nueva planta
depuradora.
El principal
financiamiento para este proyecto se ha brindado además de la Universidad
Nacional el IMAS, el MAG además del INA, la UCR,
el ITCR e instituciones como el INAMU ya que la mayoría
de los participantes, un 90% aproximadamente son mujeres.
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Las ostras se siembran
de tres milímetros y se cosechan alrededor de 7 centímetros, para su
crecimiento duran aproximadamente 9 meses en las granjas.
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Cuadro de datos
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"Para atender el proceso
de desarrollo, la UNA, hasta el presente año 2014, ha articulado
internamente el Laboratorio de Moluscos de la Estación de Biología Marina
en Puntarenas, la Estación Nacional de Ciencias Marino-Costeras y el
Programa de Desarrollo Integral del Golfo de Nicoya, como responsables
directos, articulándose a la vez con el Programa de Regionalización Inter
universitario del Pacífico Central del Consejo Nacional de Rectores (CONARE), para los procesos de
acompañamiento, donde son contraparte, el Instituto Tecnológico de Costa
Rica (TEC) - Sede en Santa Clara, y la Universidad de Costa Rica (UCR) -
Sede del Pacífico, a través del Programa de Regionalización
Interuniversitaria del Pacífico Central - CONARE, donde se ha incorpora a
su vez el Instituto Nacional de Aprendizaje a través del Programa
Nacional, INA-PYMES y el Núcleo
Náutico Pesquero en Puntarenas, quienes han venido apoyando a los
emprendimientos ostrícolas, en la formulación del plan estratégico de
gestión empresarial y la construcción de sistemas de cultivo" ECMAR.
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Medición de semilla para entregar a
productores.
Con la siembra
de ostras se espera que, a mediano y largo plazo, se implementen políticas que
disminuyan el esfuerzo pesquero en el Golfo de Nicoya, proporcionando una
fuente alternativa de ingresos y mayores opciones de desarrollo. El actual
proyecto consolida la actividad de producción de ostras, al contar con
capacidad de producción para abastecer al menos a 15 granjas ostrícolas.
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El Biólogo Gerardo Zúñiga Calero, Coordinador del
Laboratorio Nacional de Producción de Semillas de Ostras habla sobre el
potencial del laboratorio especialmente en áreas biotecnológicas.