Nº 2, febrero, 2020

Información en los tiempos del coronavirus

·         "Que este coronavirus llegue a Costa Rica es poco probable, pero no imposible", Dra. Eugenia Corrales Aguilar

·         Moraleja de la actual epidemia: más preparación, vigilancia e investigación

William Mora M.
wmora@conicit.go.cr

Si bien la interacción global de las comunidades científicas ofrece grandes ventajas, también se apuntan los riesgos como la emisión de informaciones sin la suficiente validación científica (peer review) o, peor aun, la proliferación de noticias ancladas en teorías conspiratorias de diversa naturaleza.

En el "boom" del nuevo coronavirus, una investigadora ha acaparado tiempo mediático con justa razón; setrata de la Dra. Eugenia Corrales Aguilar, investigadora del Centro de Investigaciones en Enfermedades Tropicales (CIET) y del Laboratorio de Virología Médica de la Facultad de Microbiología de la Universidad de Costa Rica, especialista en virología graduada en Alemania.

¿Existe alguna probabilidad de que personas en tránsito a ese país puedan exponerse al coronavirus?

Que este coronavirus llegue a Costa Rica es poco probable pero no imposible; el virus puede transmitirse por personas infectadas en otros países no necesariamente solo de China.

Como lo indica la Dra. Corrales Aguilar, hay modelos matemáticos que estiman tales probabilidades; sin embargo, se deben considerar variables como que en el país no estamos en el periodo de mayor pico de virus respiratorios.

De acuerdo a los datos suministrados por el Ministerio de Salud en los primeros días de febrero se había descartado 11 casos a escala nacional.

Desde la perspectiva de esta investigadora, las autoridades sanitarias han tomado las medidas oportunas para ofrecer información oficial sobre esta epidemia.

Sí cuestiona la manera cómo algunos periodistas han querido abordar el tema, en particular cuando erróneamente se indicó en publicaciones internacionales que este coronavirus pudo haberse transmitido de una serpiente.

La cuarentena

¿Hasta dónde la cuarenta es el medio más efectivo para controlar la expansión de este coronavirus?

Para la Dra. Corrales Aguilar, aunque la cuarentena decretada por las autoridades chinas no garantiza la reducción de la expansión del virus, dadas sus características clínicas particulares, sí ha contribuido a la preparación de los sistemas sanitarios de los países y a promover una mayor educación en los ciudadanos.

Por primera vez en la historia cerca de 60 millones de personas han sido obligadas a permanecer en aislamiento para prevenir contagios.

Según lo refiere la investigadora, una medida similar de las autoridades sanitarias de los países afectados en el 2003 fue efectiva para controlar el brote epidémico del SARS, al punto que el virus desapareció y no se han vuelto a registrar casos.

Para la Dra. Corrales Aguilar día con día se irá modificando el cuadro de esta epidemia. Por ejemplo, aún se desconoce cuántos de los fallecidos tenían coinfecciones como influenza, otras enfermedades como cáncer, enfermedades pulmonares de fondo y alzhéimer, o sistemas inmunes debilitados producto del fumado.

Escenarios

A futuro se podrá determinar cuál será el comportamiento de esta epidemia de coronavirus; por el momento, se sabe que su periodo de incubación va de 1 a 14 días con una media de 5,2 días. Además, se está valorando si es transmisible en la fase de incubación o solo cuando ya aparezcan los síntomas.

A juicio de la Dra. Corrales Aguilar resulta factible el contagio en el periodo de incubación como acontece con el virus de la influenza.

Los estudios demuestran que el virus se transmite por la vía respiratoria; no por la vía oral ingiriendo alimentos o en contacto con fluidos corporales como ocurre en el ébola.

¿Cuánto puede sobrevivir este virus?

Según lo expresa la Dra. Corrales Aguilar, los coronavirus respiratorios podrían ser infecciosos hasta 96 horas en superficies, pero esto depende de factores ambientales como el material orgánico, la humedad y la temperatura. Otros virus se comportan de forma diferente. Por ejemplo, el virus del SARS sobrevive de 72 a 96 horas; el virus de la hepatitis A 60 días; el virus herpes simplex 8 semanas.

La resistencia de estos virus depende de si tienen o no membrana y de su capacidad genética. Los hay que sucumben a los químicos de limpieza como el cloro; mientras otros como el virus de la polio sobreviven a otros desinfectantes.

La expectativa de los científicos es determinar si el virus decaerá con la cuarentena, aspecto inobservado en esta coyuntura; también existe la posibilidad de volverse endémico como otros coronavirus respiratorios o manifestarse estacionalmente en brotes anuales (como la influenza).

Acciones humanas

El 72% de los virus emergentes que afectan humanos proceden de hospederos mamíferos. Algunos de estos se consideran intermediarios, que a su vez fueron infestados por los mamíferos llamados reservorios. En el caso de varios coronavirus, tales reservorios son varias especies de murciélagos.

El reservorio natural del virus del SARS es un murciélago (probablemente de la especie Rinolófilos) y fue transmitido a un mamífero peri doméstico (civeta); luego pudo saltar a los humanos dada su capacidad de mutación. En el caso del Síndrome Respiratorio del Medio Oriente (MERS) su transmisión se da de murciélagos a camellos dromedarios, de donde pasó a las personas.

En la naturaleza abundan coronavirus propios de especies de animales; los felinos, las tortugas, los cerdos o el ganado poseen sus propios tipos.

Resulta común desconocer que los virus y las bacterias son concomitantes a la biología humana; como comenta la Dra. Corrales Aguilar, por cada bacteria que nos habita al menos existen 1000 virus.

Realidad que atender

La investigadora hace un llamado a mantener los esfuerzos de control de los virus del zika y del dengue en el país.

Justo por que la población pierde el miedo a morirse por estas causas es necesario extremar la prevención.

Del mismo modo, alienta a invertir más en este tipo de investigaciones y en formación de especialistas que aborden el estudio de estos virus.

̶ Soy producto de la educación pública universitaria costarricense, y gracias a una beca pude estudiar en Alemania; por eso, tengo algún conocimiento para hablar y profundizar en estos temas.

Con estas epidemias, según su experiencia, lo que se observa es un interés inicial por crear institutos para resolver los enigmas; al cabo de un tiempo ya no hay más inversión y se abandonan las iniciativas.

También urge combatir el divorcio entre la atención clínica hospitalaria y la investigación en las universidades.

̶ Hay una lucha constante por egos y celos que dejan de lado el interés mayor del país.

De acuerdo a un reportaje de Deutsche Welle, de principios de febrero, América Latina debería enfocarse en enfrentar la epidemia de dengue. Solo entre el 2019 y el 2020 se registraron más de 3 millones de casos y cerca de 1500 muertes.

En enero de este año, la organización Panamericana de la Salud (OPS) levantó alertas por las 125 mil personas enfermas por esta causa. En Costa Rica la cifra reportada de dengue fue de 9.400 casos.

 

 

"Somos más virus que personas..."

·         La rutina ha cambiado para la Dra. Eugenia Corrales Aguilar

William Mora M.
wmora@conicit.go.cr

Las constantes solicitudes de entrevistas la han convertido en un referente de información sobre el nuevo brote de coronavirus en China. Las consultas de la más diversa índole han puesto de relieve el valor de divulgar el conocimiento científico de manera responsable y con sentido de oportunidad.

̶ Vivimos en un planeta sin fronteras, la geografía es una.

Me impresiona ver la gente se preocupe tanto por este virus, pero no se interesa por ponerse una vacuna contra la gripe, o por eliminar un criadero de dengue; lo tenemos aquí y eso nos está impactando.

̶ Es un llamado a la conciencia, este virus quizá no nos traiga consecuencias, como el zika o el dengue...

Hemos estabilizado la situación con respecto a estos virus, por el buen sistema de salud; creo que ha habido 27 muertes desde el brote en 1993 por el dengue; aunque la gente se enferme, al final le pierden el miedo.

̶ ¿Cuál es para usted la moraleja final de esta epidemia, sobre todo en un país donde no se puede invertir mucho en investigación?

Usted dijo al principio que me he vuelto referencia, pero por qué lo he sido. Bueno, porque el país ha invertido en mi formación y hoy puedo contar con un doctorado en virología; porque la universidad ha invertido fondos para estudiar enfermedades emergentes.

La gente me llama y me dice que hay un montón de murciélagos en la casa... y le digo: "̶ Vea esos murciélagos tienen una razón por estar ahí, dan servicios ecológicos muy importantes, no los maten, son los murciélagos los que causan más polinización a nivel mundial. Hay los que comen insectos, y frutas, controlan plagas."

La moraleja es evidente: requerimos invertir más en investigación y en formación profesional.  Soy producto de la educación pública universitaria y gracias a una beca pude estudiar en Alemania.

̶ ¿Tiene intención en investigar sobre este coronavirus?

Sobre este coronavirus es muy hipotético empezar a invertir recursos si ni siquiera ha llegado al país. 

̶ ¿Para usted no sería prioridad investigar en este coronavirus?

Para mí no, la prioridad es el dengue y el zika. En el caso del zika, en el país ha bajado el alarmismo, ya se volvió endémico. Ahora mis líneas de investigación están en buscar la relación entre animal (mamífero eslabón), el ser humano y el mosquito para ver qué otros virus están circulando en el país.

Muy pronto estaremos sacando publicaciones reportando la presencia aquí del virus del Oeste del Nilo y la encefalitis de San Luis. Se han detectado animales positivos por esos virus y hay una potencialidad de que infecten al ser humano; o de que muchos casos registrados bajo la sombrilla del dengue y el zika no lo sean y, por lo tanto, se necesite un diagnóstico de laboratorio confirmatorio.

̶ En estos días su rutina ha cambiado un poco.

Uuuff, he dejado mis rutinas por estar dando entrevistas. Ha sido una experiencia muy fuerte, hay entrevistas de entrevistas y calidades de calidades. Muchos de los periodistas no saben ni mi nombre. Esto me ha causado recelo por las declaraciones sacadas de contexto que se prestan para malas interpretaciones.

̶ ¿Es parte de su responsabilidad hablar de sus estudios?

Sí, he puesto en pausa mi trabajo de investigación en las últimas tres semanas y cada vez tengo menos tiempo para cumplir mis tareas. Debo estar informada en tiempo real; estar pegada a Twitter y consultar a otros expertos. Eso lo hago siempre pero no de manera tan intensa.

̶ ¿Usted se cree popular ahora?

(Ríe...) Nunca he sido popular.

̶ Su rostro está más en los medios, su nombre también. ¿En todo ese ambiente ha habido consultas que le han sacado de las casillas?

Sí, la de la periodista que dijo que iba titular su nota "La maldita serpiente..."

O cuando me preguntaron sobre cómo se debe estornudar; pero luego entendí que eso es parte de la información para educar a la gente. 

̶ ¿Los virus se van con usted todos los días... en su cabeza?

Somos más virus que personas; más virus que bacterias. Por cada bacteria en nuestro cuerpo hay por los menos 1000 virus; pero esos son virus que nos ayudan al balance con las bacterias. Usted es  células persona;  bacterias, y  virus.

̶ Transitamos con ellos y vivimos con ellos, son parte de expresión de nuestra vida.

Exacto. Hoy hay estudios que dicen que parte de nuestra personalidad y salud está asociada con el tipo de bacterias que nos colonizan y su metabolismo, y si estas bacterias son controladas por los virus, entonces más bien son los virus los que están guiando nuestra personalidad y salud.

̶ Cuando usted se va para su casa a descansar ¿sigue pensando en los virus?

Me llevo los virus para la casa; en mi cabeza trato de no hacerlo y me ha costado terapia psicológica de años para decir hasta aquí llega mi trabajo y empieza mi vida personal. Por eso hago deporte, voy al cine o leo material no científico para dejar de pensar solo en ellos...

̶ ¿Está casada?

No, soy soltera. A veces debemos ir de gira en los días libres o estar pendientes de los experimentos todo el tiempo. No puedo decirle a los virus: "̶ Eeeyy esta Semana Santa me doy libre... vean a ver qué hacen..." Esto no impide que una persona pueda compaginar una vida en pareja con la vida profesional en virología. Creo que más bien yo soy la excepción...

̶ ¿Hacia dónde va usted en esto de la investigación científica?

Nunca se puede separar la docencia de la investigación. Continuaré con mis líneas de investigación en arbovirus pero además deseo realzar una licencia sabática, ir a Canadá para estudiar microbioma y virus respiratorios con la Dra.  Marie Claire Arrieta quien actualmente es investigadora y docente de la Universidad de Calgary. Ella trabaja en cómo la modificación en las bacterias a momentos tempranos de vida influye en el desarrollo de asma y alergias; otros investigadores han visto que en pacientes humanos ciertos virus respiratorios al infectar a muy temprana edad también son factores de riesgo para desarrollar asma. Queremos mezclar las dos corrientes para realizar experimentos en ratones modificados con microbiota controlada y sin microbiota; ver qué pasa cuando se les inoculan con cierto tipo de bacterias y virus.

El problema con la investigación en Costa Rica son los fondos limitados, la baja de inversión y la falta de plazas para el personal. Aunque poco a poco esto ha ido cambiando para bien.