Nº 4, abril, 2018

Investigar es invertir

·         María José Suárez: "La ciencia debe responder a las necesidades del país".

William Mora M.
wmora@conicit.go.cr

Mientras, en el pasillo circundante, deambulan sus colegas, todos de apariencia juvenil. En estas paredes declaradas patrimonio nacional, se construye un diálogo cotidiano para resolver los enigmas de muchos males que nos ponen entre la vida y la muerte.

Apenas se graduó en la carrera de Biotecnología del Instituto Tecnológico de Costa Rica (TEC) decidió proseguir con sus estudios de microbiología en la Universidad de Costa Rica (UCR), donde ya obtuvo su licenciatura y actualmente termina su maestría en esta disciplina. Su vínculo docente con la Escuela de Medicina la llevó a trabajar en el CIHATA primero como asistente y luego como investigadora titular.

En este ambiente ha podido valorar el trabajo interdisciplinario con otros profesionales de la salud, especialmente médicos quienes, atareados con la atención de la consulta de sus pacientes, les plantean las inquietudes para nuevos proyectos de investigación.

Ambiente favorable

La profesional resalta la ventaja del CIHATA de ubicarse en el Hospital San Juan de Dios. Esto los vincula a profesionales de la salud con quienes pueden proponer estudios y dar seguimiento a los pacientes para verificar las respuestas a posibles tratamientos.

Como ejemplo describe el trabajo realizado en el diagnóstico de la enfermedad celiaca; gracias al esfuerzo conjunto con los médicos es posible que hoy se puedan realizar pruebas genéticas para determinar, con especificidad, este padecimiento. 

El gluten es una sustancia presente en alimentos como el trigo, la avena y la cebada generadora de respuestas autoinmunes en el organismo de las personas con predisposición genética.

Gracias a la investigación liderada por María José, se ha observado una mayor frecuencia de haplotipos DQ8 en personas que se estudian por enfermedad celiaca, contrario a lo descrito en la literatura científica.  Estos hallazgos plantean nuevos retos en el diagnóstico de la enfermedad en nuestro país.

¿Cómo estimular más la ciencia endógena?

Trabajando más y demostrando que se puede hacer investigación local.

Se busca contar con una prueba genética realizable en el país, lo cual resulta complejo debido a las múltiples mutaciones expresadas en los distintos grados de severidad del mal.

Valor de la humildad

Hija de padres emprendedores de San Antonio de Desamparados, María José se ve en 20 años trabajando en investigación científica.

Está casada hace tres años con José Vinicio Arias, biotecnólogo del TEC, y vive hoy en Las Nubes de Coronado. A diario se moviliza por las ciclo vías desde la UCR hasta el Hospital San Juan de Dios.

¿A quién admira en la actividad científica?

Al Dr. José María Gutiérrez, lo admiro muchísimo, a pesar de lo mucho que ha logrado mantiene esa sencillez y humanismo, no pierde el norte por su nivel profesional.

Mi familia me apoya y también los admiro, les debo todo lo que soy. Ellos tienen una empresa de comidas, un servicio de "catering," y empezaron de cero.

¿Qué valora en una persona?

La humildad; eso se ve y se percibe.

¿Qué le diría usted al nuevo gobierno?

Le diría que la investigación es una inversión, es algo que es necesario porque los costos de no hacerla serán mayores.

 

Urge vincular sector privado con la investigación

·         Biodiversidad y atracción de grandes industrias, claves para promover ciencia endógena

William Mora M.
wmora@conicit.go.cr

A más de 5 mil kilómetros, en la Universidad de São Paulo, Brasil, Gilberth Alvarado Barboza toma tiempo de la atareada agenda académica para dar sus opiniones sobre las perspectivas del desarrollo científico costarricense, desde la lente de un investigador joven.

William Mora (WM): ¿Desde su perspectiva cuál es el principal reto que tiene Costa Rica para desarrollar una ciencia endógena?

Es necesario un cambio completo del paradigma en dos aspectos: Primero, dar un valor real al recurso biodiversidad que realmente nos distingue a nivel mundial mediante la creación de conocimiento base con aplicación a otros sectores del neotrópico y beneficios ecosistémicos tangentes para países en regiones de baja biodiversidad. Segundo, generar un desarrollo socio-económico en el ámbito tecnológico y científico brindando las condiciones idóneas para la instalación y consolidación de grandes industrias que requieran personal en estas áreas desde una base técnica hasta elevados niveles de capacitación y formación académica. Los dos puntos anteriores no se podrán lograr mientras tengamos los ínfimos niveles de inversión actuales en la ciencia, tecnología e innovación de nuestro país. Debemos promover primero la demanda de investigadores y científicos; es mejor invertir en la creación de los espacios que demanden ese personal. Tales espacios se encargarán de formar el recurso humano idóneo para suplir sus requerimientos y no invertir en la formación de recurso humano con un altísimo nivel de capacitación sin contar con el espacio para poder desarrollar en un alto porcentaje su potencial.

WM: Según el Registro Científico y Tecnológico del Conicit más de 35% de los investigadores nacionales tienen más de 50 años; en contraste apenas el 12% se pueden considerar investigadores jóvenes (menos de 35 años). ¿Qué debemos hacer para asegurar la sucesión en la actividad científica local?

sabríamos el retorno real que existe de la inversión en cada una de las áreas. Creo que los productos son los indicadores reales para poder determinar las carencias existentes. Es urgente un sistema que evalúe la producción y que la inversión favorezca la alta producción, es la única manera de poder mantener un sistema competitivo con los escasos recursos con los que contamos.

WM: Según el último informe de indicadores del Ministerio de Ciencia, Tecnología y Telecomunicaciones (Micitt) la inversión en investigación y desarrollo (I+D) pasó del 0,58 % en el 2014 (US$ 415,9 millones) al 0,47% en el 2016 (US$ 260,8 millones), una reducción equivalente al 0,11 del Producto Interno Bruto. ¿Cómo lograr más recursos para la actividad de investigación cuando las prioridades del país parecen centrarse en el combate a la pobreza y las mejoras en la infraestructura?

Las prioridades en nuestro país difícilmente van a cambiar. Creo que el Micitt debe establecer un plan y una estrategia real como la que establecemos los investigadores, búsqueda de financiamiento a nivel internacional y una sana y efectiva administración y colocación de esos recursos en las diferentes unidades de investigación que respondan al objetivo de la inversión. Me parece que el Micitt debería convertirse en esa plataforma estatal capaz de canalizar inversión a nivel internacional para investigación y desarrollo. La otra gran disyuntiva presente en nuestro país es el divorcio entre el sector industrial privado y el sector de investigación; ambos sectores deben unirse y caminar juntos con propósitos similares, esta sería otra excelente fuente de financiamiento. De la misma forma, el ministerio podría jugar un rol fundamental en poner a dialogar ambos sectores o atraer inversión de industrias y empresas que requieran este tipo de personal y servicios.

WM: ¿Qué le demandaría al nuevo gobierno para facilitar la actividad científica nacional?

Que le ponga atención al sector, siempre ha sido un sector olvidado. Creo que el gobierno no vislumbra el Micitt como el ente que podría generar los mejores indicadores de inversión y desarrollo. El gobierno debería también hacer uso del conocimiento que se está generando y aplicarlo a su institucionalidad para mejorar su desempeño. Me gustaría poder demandar la eliminación al máximo de trámites y dificultades para el movimiento de reactivos, muestras y demás implementos o materiales relacionados con la investigación; que, aunque no seamos un destino atractivo para las empresas que proveen lo necesario para hacer investigación y ciencia, al menos, no se obstaculice la adquisición, transporte y traslado de activos. Demandaría la creación y establecimiento de convenios que nos faciliten contactos a nivel internacional y que nuestro país se vea como un destino atractivo para el establecimiento de colaboraciones. Me gustaría poder demandar un acercamiento con empresas privadas y el establecimiento de un puente que permita el intercambio de fortalezas entre ambos sectores. Me gustaría poder disponer de una fuente de becas permanente que permita a los estudiantes de mi laboratorio poder dedicarse exclusivamente a su proceso de formación. Me gustaría poder disfrutar de un fondo anual acorde con mi producción científica más reciente para poder impulsar de forma inmediata y dar un mantenimiento base al funcionamiento del laboratorio. En fin, creo que debería primero existir un diálogo cercano y permanente entre el gobierno y los investigadores para establecer un buen plan de desarrollo para el país.