Propuesta aumentaría base salarial y frenaría las anualidades en la UCR

Estudio técnico de la Oplau determinó insostenibilidad de las finanzas de la universidad, por lo que la administración está valorando un nuevo sistema de salarios con tope a las anualidades.

By Lucía Molina Nov 05, 2019 23:26pm

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Las finanzas de la Universidad de Costa Rica (UCR) son insostenibles si se mantiene el régimen salarial actual, según un informe de la Oficina de Planificación Universitaria (Oplau).

El informe señala que si el escenario no cambia para el 2020, la UCR tendrá un déficit de ¢500 millones y para el 2024 será de ¢25.700 millones.

El rector de la UCR, Henning Jensen, compareció el pasado cuatro de noviembre ante la Asamblea Legislativa y aseguró que la principal fuente de desbalance presupuestario son las anualidades salariales.

Jensen dijo que están en proceso los estudios actuariales que respaldan la viabilidad de un nuevo régimen salarial que se propondrá a su salida el próximo año, para que sea valorado por quien ocupe la Rectoría.

La propuesta tiene dos elementos básicos: un incremento en las bases salariales y una disminución del crecimiento vegetativo. De esta manera, la base salarial se convierte en el componente principal del sueldo.

El crecimiento vegetativo de los salarios comprende todos los pluses salariales que no responden al mérito o que son "automáticos", como las anualidades. El aumento en la base salarial de la universidad sí se determina por mérito académico.

"Entonces, si yo soy instructor y no tengo una producción importante, seré instructor toda la vida. De esta forma se tendrían mejores salarios de entrada, reduciremos la inequidad y evitaremos que salarios crezcan a los montos que crecen en la actualidad", afirmó Carlos Araya, vicerrector de Administración de la UCR.

César Parral, secretario General de Sindicato de Empleados de la Universidad de Costa Rica (Sindeu), aseguró que, según datos proporcionados por sus expertos, la universidad no tiene déficit, que todavía tiene recursos suficientes para cubrir las necesidades y que es "el acuerdo del FEES el que no responde a las necesidades, porque permitió un recorte".

"Nosotros lo que negociamos sobre el régimen salarial es lo que está en la Convención y eso tiene que regir los próximos tres años. Todo lo demás está contra ley", agregó Parral.

Jensen dijo, durante su comparecencia en la Asamblea Legislativa el pasado lunes, que considera necesario denunciar la Convención Colectiva ante el Ministerio de Trabajo para que la anualidad sea rebajada al 3%.

¿De dónde viene el desequilibrio?

Las anualidades de la UCR fueron del 5,5% entre 2009 y hasta el 2018, cuando se renegoció la Convención Colectiva y se bajó a 3,75% sobre el sueldo (salarios más otros beneficios).

Inicialmente, la negociación del aumento del 3% al 5% solamente era para los profesionales en salud, pero las autoridades universitarias dijeron no se podía ser selectivo y decidieron aumentar a toda la universidad.

"El 2009 era una época de vacas gordas, por supuesto que yo estaba feliz de recibir ese 5,5% pero aún así en su momento algunos directores firmamos una carta diciendo que esto es insostenible", dijo Leonardo Castellón, director de la carrera de Administración Pública en la Universidad de Costa Rica.

Carlos Araya asegura que un segundo acuerdo que aportó al aumento de la masa salarial actual fue el que tomó el Consejo Universitario en el 2009 al romper el tope en el pago de anualidades.

"Hasta el año 2009 el máximo eran 30 anualidades; al romper el tope, si yo trabajo 50 años voy a tener 50 anualidades y eso ha terminado en inequidades considerables entre las personas que tienen muchos años de antigüedad y las que vienen ingresando, que no consideran el salario de la universidad competitivo", dijo Araya.

Según los datos de la Oficina de Recursos Humanos, en el 2009 el salario base representaba el 41,3% de toda la masa salarial; en tanto que el pago de anualidades constituían el 29,5% y el régimen académico (que incentiva la productividad) un 8,8%.

En el 2014, cinco años después de la aprobación del 5,5% de las anualidades, la base salarial representaba el 37,5%, mientras que las anualidades constituían el 34,6% y el régimen académico un 8,4%.

Castellón aseguró que, tras la decisión, Recursos Humanos tuvo que considerar la posibilidad de que los salarios hasta se duplicaran cada cinco años solo por el crecimiento vegetativo.

También aseguró que la UCR tiene un campo de acción a nivel presupuestario limitado por la ley y que actualmente las decisiones solamente se pueden enfocar en que la masa salarial crezca menos rápidamente.

"Hay un tema de derechos laborales adquiridos, podrían realizarse reducciones o despidos, pero tendrían que haber indemnizaciones importantes a los trabajadores. Esto también desembocará en un conflicto político", explicó Castellón, quien además aseguró que el despido de personal sería una decisión que afectaría el funcionamiento de la universidad.

"¿Qué vamos a sacrificar? La acción social nos da presencia en las comunidades, la investigación es lo que permite que tengamos grandes desarrollos en el país o la docencia; porque entonces tendríamos que recibir menos estudiantes", expresó.

Castellón considera que, tomando en cuenta los límites legales que tiene la universidad, las acciones de contención de gasto que se han implementando en los últimos años han sido responsables, pero que a la comunidad universitaria todavía se le debe un régimen salarial ligado a la evaluación del desempeño.

"Que los incentivos yo no me los gane simplemente porque estuve un año más en la universidad, que tiene un valor, pero hay personas que durante el año lo hicieron bien y otras que no lo hicieron bien y ambas ganaron la anualidad", aseguró Castellón.