Boletín Nº 182 - Enero 2018
25/01/18
‘Reloj de pobreza’ hace tictac con
datos en tiempo real
Crédito
de la imagen: Organización Panamericana de la Salud
De un vistazo
El Reloj Mundial de la Pobreza muestra estimaciones y tendencias en
tiempo real
Sencillas visualizaciones de datos persiguen claridad para inspirar
acciones políticas
Equipo defiende riesgos necesarios con fuentes de datos y modelación
Por: Tania Rabesandratana
El proyecto busca más claridad y diálogo
abierto sobre pobreza. ¿Se sobre-simplifica? Tania Rabesandratana
investiga.
Cada minuto en
Nigeria, 6.5 personas caen en la extrema pobreza. Y mientras se escribe esta
oración, 42.5 por ciento de su población — 82.640.203 personas — son
extremadamente pobres.
Estas son estimaciones
precisas al segundo, que vienen del Reloj Mundial de la Pobreza; lanzada en mayo de 2017, se trata de una base
de datos que recopila las cifras de ingreso nacional junto con gráficos fáciles
de seguir y en tiempo real. La creciente tendencia de la pobreza en Nigeria se
traduce en el color rojo del mapa en el sitio web.
Las fuentes oficiales
de información no brindan estimaciones tan precisas sobre la pobreza. Las
cifras de la ‘pobreza mundial actual’, presentadas frecuentemente en grandes
reuniones internacionales, usualmente se basan en datos cuatrienales, dice Homi Kharas, el asesor económico
principal detrás del reloj, quien también coordina el programa mundial de
economía y desarrollo en Brookings Institution, un
tanque de pensamiento en Estados Unidos.
Esta es exactamente la mentalidad que estamos tratando de romper.
Queremos que todo el mundo hable de las dinámicas de la pobreza.
Homi Kharas
El equipo del reloj
espera dibujar una imagen más clara y oportuna de la pobreza, de modo que los
países puedan revisar su progreso por escapar de la pobreza extrema para el
2030, uno de los Objetivos de Desarrollo Sostenible (ODS) de las Naciones
Unidas.
En este proceso, el reloj también puede presentar sorpresas.
Al contrario de
Nigeria, India está bien encaminada hacia alcanzar este objetivo, y aparece en
el mapa en color verde. En el momento de escribir estas líneas, el reloj
estimaba que 83.653.728 personas, que corresponde al 6.3 por ciento de su
población, viven en pobreza extrema (con menos de USD1,9 por día), y 47
personas escapan de ella cada minuto.
Esto significa que, en
los próximos meses, Nigeria tendrá el mayor número absoluto de personas pobres
en el mundo lo cual, de acuerdo con Kharas, es
inesperado, dado que India ha "mantenido ese título" por cientos de años.
Una captura de pantalla del
Reloj Mundial de la Pobreza, que muestra las tendencias de pobreza en Nigeria,
tomada en días recientes.
El reloj es fruto del
brazo sin fines de lucro de World Data Lab (WDL), una compañía australiana. Sus modelos resultan
principalmente de encuestas de hogares a nivel nacional, disponibles
públicamente, las cuales son realizadas típicamente por los gobiernos cada tres
a diez años. Estos modelos proyectan cifras de ingresos en el presente y en el
futuro.
Para India, por
ejemplo, las estimaciones se basan en datos del 2012 recopilados por la Oficina
Nacional de Encuestas, ajustada y publicada por el Banco Mundial en su sitio web PovcalNet. A pesar de que los algoritmos del reloj confían en gran medida en
datos del Banco Mundial, el banco no es responsable por el reloj.
Estos algoritmos
estiman cuánto cambian los ingresos de las personas a lo largo del tiempo en
cada país, usando pronósticos del crecimiento económico y escenarios de largo
alcance que dan cuenta de eventos globales como el cambio climático.
Las estimaciones,
disponibles para todas las naciones -excepto Siria-, luego se emparejan con
gráficos para mostrar qué tan rápido cada país escapa de la pobreza, y si
alcanzarán la meta para el 2030. "Queremos que cada país utilice esta
herramienta individualmente, para ver cómo les va en comparación con sus
vecinos", dice Kharas.
Una ‘provocación bienvenida’
El proyecto ha
recibido una respuesta variada. Algunos economistas del Banco Mundial dicen que
sus predicciones simples brindan un falso sentido
de la precisión.
"Si [proveer tales
estimaciones y pronósticos tan precisos] fuera algo seguro, ya lo hubiéramos
hecho", dice Francisco Ferreira, encargado en el Banco de supervisar los
programas de investigación en pobreza, inequidad y agricultura. Por ejemplo,
"si hay una epidemia o el precio del petróleo sufre un cambio drástico, entonces
el número de nigerianos pobres crecerá o decrecerá", dice, agregando que las
visualizaciones del reloj esconden esas "enormes" incertidumbres.
Pero Kharas dice que Ferreira no entiende el punto, y que el
reloj claramente es una prioridad que está por encima de la jerga económica.
"Agregar complejidad....
desvirtúa los esfuerzos [de comunicación] y refuerza la idea de que las
dinámicas de la pobreza son un tema que solo los ‘expertos’ pueden discutir",
argumenta Kharas. "Esta es exactamente la mentalidad
que estamos tratando de romper. Queremos que todo el mundo hable de las
dinámicas de la pobreza".
"[El reloj] hace que
la información [de la pobreza] sea más accesible para una audiencia general",
dice Haishan Fu, director del grupo de datos en
desarrollo del Banco Mundial. "Pero quisiéramos ver un mejor abordaje para
comunicar las -a menudo- grandes incertidumbres en estas estimaciones".
El vicepresidente para
África de WDL, Bitange Ndemo,
cree que para encender la conversación y la acción vale la pena asumir el
riesgo con los números.
"Necesitamos tener una
cultura de usar datos para desarrollar políticas basadas en la evidencia", dice
Ndemo, quien anteriormente se desempeñó como
secretario del Ministro de Información y Comunicación de Kenia.
Otros observadores han adoptado el enfoque del reloj. Por ejemplo, el Informe
de Índices y Tableros de los ODS -que supervisa el progreso hacia los
objetivos- usa los datos del reloj en su edición del 2017.
El reloj es una
"bienvenida provocación para el sistema de datos oficiales, el cual ha sido
lento para adoptar nuevas técnicas de estimaciones para proveer datos en tiempo
real", dice Guido Schmidt-Traub, el codirector
científico del reporte.
La Organización
Internacional para la Francofonía también ha pedido a
WDL desarrollar un reloj específico comparando países africanos
francoparlantes.
Empujón por mejores datos
Los arquitectos del
reloj argumentan que una de sus fortalezas es su esfuerzo por incluir datos subnacionales utilizando métodos complejos para
correlacionar datos de censos con encuestas de hogares. Pero Ferreira, de
nuevo, demanda aún más cuidado con tales datos de fina resolución,
particularmente para los pronósticos.
WDL ha agregado datos
a nivel de condado para Kenia, y está trabajando en esto con Indonesia y
Paquistán.
En Kenia, dice Ndemo, el reloj ayuda a los gobernantes a prestar mayor
atención a problemas al destacar las diferencias entre países. Meru y Nyeri, por ejemplo, son
dos grandes países agrícolas; ambos están en su camino hacia el escape de la
pobreza para el 2030, pero Nyeri tiene una tasa de
pobreza más alta y una tasa de fuga más lenta, lo que significa que requieren
diferentes intervenciones de política.
El reloj podría ser
más preciso si se agregaran datos privados o filantrópicos, dice Ndemo. Por ejemplo, el operador keniano de telefonía móvil Safaricom "tiene algunos de los mejores datos" de usuarios
y de su servicio de transferencia de dinero M-Pesa, pero es reacio a compartirlos,
lamenta.
Suena como ciencia ficción, pero en realidad es posible cuando uno se
sienta con personas que conocen lo suyo.
Jesús Crespo Cuaresma
Para contrarrestar los
datos no disponibles o pobres de los gobiernos, el equipo del reloj está
buscando socios en el espacio.
"Suena como ciencia
ficción, pero en realidad es posible cuando uno se sienta con personas que
conocen lo suyo", explica Jesús Crespo Cuaresma, líder del Instituto de
Macroeconomía en la Universidad de Viena de Economía y Negocios.
En agosto, el equipo
se reunió en el Centro Bellagio de la Fundación
Rockefeller, en Italia, con Olha Danylo,
una investigadora del Instituto Internacional para el Análisis de Sistemas
Aplicados en Austria, quien usa el aprendizaje automático para analizar datos
de teledetección.
Investigadores pueden
estimar la pobreza desde imágenes por satélite, al extraer información acerca
de la ubicación de asentamientos humanos, infraestructura vial, áreas agrícolas
y la intensidad de la luz. "Datos de hogares pueden ser recolectados cada cinco
años, pero las imágenes por satélite llegan a diario", explica Danylo.
Por ejemplo, el equipo
estudió cómo combinar las imágenes satelitales con grabaciones de operadores de
telefonía móvil en Senegal. Y en Corea del Norte, donde no hay datos
disponibles, se combinan imágenes satelitales con imágenes de turistas.
El encuentro en Bellaggio "plantó una semilla", dice Crespo, para que la
investigación estime números de personas pobres en Corea del Norte, con la
aplicación potencial del método para otros lugares con pocos datos, como
Somalia.
"Aún es una tarea muy
complicada", dice Danylo. "Pero es muy emocionante
trabajar con personas que tienen grandes ideas y quieren hacer una diferencia
en el mundo".
Este artículo fue financiado por el Centro Bellagio de la Fundación Rockefeller. Por casi 60 años este Centro ha apoyado a
individuos que trabajan para mejorar las vidas de las personas pobres y
vulnerables a nivel mundial a través de sus programas de conferencias y
residencia, y ha servido como un catalizador para ideas, iniciativas y
colaboraciones transformadoras.
Una vez al año, en
Centro Bellagio hospeda una residencia temática especial,
reuniendo una cohorte de académicos, profesionales y artistas cuyo trabajo se
conecta con un tema común. En 2018, la residencia tendrá lugar del 5 al 30 de
noviembre, y se centrará en el tema Ciencia para
el desarrollo. Las
solicitudes para residencias de
profesionales ya están
abiertas y las solicitudes para residencias de
escritura académica se
abrirán el 1° de marzo. Para registrar su interés, envíe un correo electrónico
a bellagio_ny@rockfound.org con
"Science for Development" como línea de asunto.