Boletín Nº 186 - Mayo 2018
Entrevista a Giacomo Rizzolatti
El padre de las neuronas espejo
busca tratamientos en el mundo virtual
Desde 1996 sabemos que existen células nerviosas que controlan el
mecanismo cerebral de la empatía, responsables de fenómenos como la risa
contagiosa. Su descubridor, Giacomo Rizzolatti,
desvela algunas de sus aplicaciones médicas actuales, potenciadas por
tecnologías como la realidad virtual.
Alejandro Muñoz | | 08
mayo 2018 08:00
Giacomo Rizzolatti en Madrid / Olmo Calvo
Hace más de
veinte años, Giacomo Rizzolatti descubrió las neuronas espejo en el mono macaco,
junto a su equipo en la Universidad de Parma (Italia). Su investigación confirmó en 1996 que un grupo de neuronas
se activaba tanto cuando el animal realizaba acciones concretas, como cuando
observaba a otros monos o personas repetir lo mismo.
Cuadro de datos
|
A
sus 80 años, Rizzolatti continúa siendo un
investigador indispensable
|
|
|
En principio, pareció tan solo un sistema de imitación
ligado a movimientos simples, como agarrar comida, pero posteriores análisis
constataron que el mecanismo permitía también hacer propias las acciones, sensaciones y emociones de
los demás. Además, el sistema también se descubrió en los humanos, con la
activación del lóbulo parietal y la corteza
motora del cerebro. El hallazgo le valió a Rizzolatti
el Premio Príncipe de Asturias de investigación en 2011,
entre otros galardones.
|
|
|
|
El neurólogo ha hablado con Sinc
con motivo de su ponencia ‘El mecanismo espejo: pasado, presente y futuro’ en
la Facultad de Medicina de la Universidad Autónoma de Madrid, invitado por
la Cátedra UAM - Fundación
Tatiana Pérez de Guzmán el Bueno en Neurociencia
A sus 80 años, el incansable científico continúa
investigando en el Consiglio Nazionale delle Ricerche (CNR) como
profesor universitario jubilado: "En el CNR ya han contratado a algunos de mis
alumnos, pero como soy más famoso atraigo más fondos europeos y privados. Y el
Gobierno italiano no da mucho dinero".
Espejos
que contagian risas
No todas las acciones provocan una activación del mecanismo
espejo. Este sistema permite una comprensión inmediata de una acción. "Si
entramos un bar y vemos a una persona agarrar una jarra, no necesitamos pensar
que va a beber cerveza. Sin embargo, si vemos un perro ladrando, a nuestro
cerebro llegarán los componentes visuales y auditivos del ladrido, pero no lo
entenderemos de inmediato. No es un mecanismo espejo".
Algunas emociones se transmiten también a través de este
mecanismo, como la risa y el asco. "El caso de risa es explotado
por muchos cómicos, que ríen para provocar que los demás se rían. Esto se
consigue mediante la activación de una zona cerebral -el giro cingulado- que
al ser estimulada en pacientes, les provoca la risa", explica.
Sus
últimos trabajos de investigación se centran precisamente en el giro cingulado, que se localiza donde ambos hemisferios del
cerebro se tocan. "Esta región cerebral no solo es responsable de la risa,
sino también de enviar alertas como ‘necesito moverme’, ‘no puedo estar
aquí’, etc. Es una parte del cerebro que señala posibles peligros".
|
Cuadro de datos
|
El mecanismo espejo permite la comprensión
inmediata de una acción. Muchas emociones, como la risa o el asco, se
transmiten a través de él
|
|
|
|
|
|
|
|
|
El neurocientífico descubrió las neuronas
espejo hace más de veinte años. / Olmo Calvo
La
empatía y sus implicaciones
Las personas
somos animales sociales y el descubrimiento de las neuronas espejo desvela algo
más sobre nuestra naturaleza. Los seres humanos tenemos "un mecanismo
específico para que, cuando vemos dolor en otra persona, también sintamos
dolor. No solo entendemos el dolor del otro de manera cognitiva, también lo
sentimos". O con otro ejemplo más desagradable, "si algo te repugna y vomitas
es posible que yo también vomite", añade Rizzolatti.
Cuadro de datos
|
La
capacidad para sentir el dolor ajeno se diluye en internet: "En el mundo
digital estás solo aunque parezca que estás con otras personas"
|
|
|
Se trata de un mecanismo específico que permite a las
personas estar no solo en el mismo estado cognitivo, sino también afectivo. Además tiene implicaciones antropológicas: "Es
extremadamente importante porque indica que las personas somos muy similares.
No lo sientes hacia las cosas o los animales. Con las personas estás en el
mismo estado".
Pero estas
capacidades se diluyen en el mundo digital. "Es un lugar un tanto extraño,
una experiencia fría. En realidad estás solo, aunque
parezca que estás con otras personas. Los japoneses hicieron un experimento
para evaluar si la respuesta emocional ante una película era igual que ante
una obra de teatro. Y en el teatro la emoción era mucho más poderosa",
explica. Las acciones presenciales son más estimulantes que sus
representaciones.
|
|
|
|
Aplicaciones
médicas
Comprender las neuronas espejo también es determinante para
tratar los trastornos del espectro autista. La información emocional y el
afecto, que se transmiten en las edades más tempranas, se apoyan en estos mecanismos.
Aunque Rizzolatti advierte de que en el autismo "hay
varias tipologías y por tanto, diversos métodos a la
hora de tratarlo".
Otra
aplicación de su trabajo es el tratamiento de derrames cerebrales o
accidentes que causan problemas en el sistema motor. "Imagina que tienes un
accidente de coche y te ponen una escayola en la pierna. Después de un mes
andando de otra manera, cuando te quiten la escayola no podrás andar bien.
Tienes que olvidar la forma de andar que habías aprendido".
En principio, pareció tan solo un
sistema de imitación ligado a movimientos simples, como agarrar comida, pero
posteriores análisis constataron que el mecanismo permitía también hacer
propias las acciones, sensaciones y emociones de los demás. Además, el sistema
también se descubrió en los humanos, con la activación del lóbulo parietal y
la corteza motora del cerebro. El hallazgo le valió a Rizzolatti
el Premio Príncipe de Asturias de investigación en 2011,
entre otros galardones.
|
Cuadro de datos
|
"Con la realidad virtual podría avanzarse
en una semana el equivalente a un mes de rehabilitación"
|
|
|
|
|
|
|
|
|
Para acelerar este reaprendizaje y olvidar los 'malos
movimientos', el neurólogo revela que han utilizado gafas de realidad virtual que estimulan las
neuronas espejo. A través de la experiencia inmersiva,
el paciente visualiza los movimientos correctos que el sistema motor debe
realizar y el mecanismo espejo se activa.
"Según algunos expertos, con esta técnica podría avanzarse
en una semana el equivalente a un mes". Estas estrategias no eximirían al
paciente de otras tareas de rehabilitación para ganar músculo. "Tenemos en
marcha acuerdos con Microsoft para seguir investigando. Están ayudándonos en el
laboratorio", añade.
Estas
técnicas punteras ya se están aplicando en colaboración con una agencia
italiana que se ocupa de la rehabilitación de las personas que han sufrido
accidentes laborales. "La tecnología es maravillosa. Antes usábamos películas y
los estímulos eran más débiles, pero ahora con estas gafas realmente parece que
estás caminando tú. Te hace sentirlo", concluye.
Cuadro de datos
|
La cultura de la imitación
Las neuronas espejo nos permiten aprender por imitación.
Esto explica por qué en deportes como el tenis o las artes marciales, el
alumno aprende mejor cuanto más cerca está de su maestro, cuyos movimientos
repite.
Pero la imitación no es solo importante en el
aprendizaje motor. Rizzolatti destaca que el
científico estadounidense Vilayanur Ramachandran escribió un ensayo afirmando que la cultura humana se basa en la
imitación, algo con lo que él está de acuerdo.
"Cuando el Homo
sapiens empieza a imitar la cultura, se convierte en cultura humana. Si
nadie hubiese inventado el teléfono, ahora no tendríamos smartphones.
Primero alguien inventa algo y después otras personas lo mejoran, con lo
que la invención se va haciendo cada vez más complicada. Es algo
fundamental en el campo científico y técnico. Así es nuestra cultura",
concluye Rizzolatti.
|
|
Zona geográfica: España
Fuente:SINC
|
|