Boletín Nº 184 - Marzo 2018
13/03/18
Medio ambiente en riesgo por fallo
de Corte Suprema de Brasil
Crédito de la imagen: Gabriel Britto /
Rainforest
De un vistazo
Restauración de
grandes áreas de Amazonía brasilera será afectada por fallo judicial
Amnistía para
productores que desbrozaron ilegalmente reservas legales
Para uno de los
magistrados, ciencia es "actividad de conjeturas"
[SAO PAULO] La
declaración de constitucionalidad otorgada por la Corte Suprema de Brasil a
diversos cambios del nuevo Código Forestal de 2012 pondría en riesgo la restauración de
grandes áreas afectadas por la degradación en la Amazonía, y ha significado un
duro golpe para los ambientalistas, quienes señalan que la decisión judicial
constituye una victoria para los lobistas de los agronegocios.
El fallo del tribunal
en buena cuenta constituye una amnistía constitucional para los productores
rurales que antes de julio de 2008 desbrozaron ilegalmente las reservas legales
—áreas que por ley deben ser intocables— para establecer allí actividades agrícolas y ganaderas.
Con una votación de 6 a 5, los magistrados
de la corte superior decidieron condonar las multas y archivar las demandas
ambientales contra los propietarios que se hayan inscrito en programas de
regularización ambiental para compensar y revertir los daños causados
anteriormente. La mayor parte de los beneficiados son grandes agricultores.
Algunos ambientalistas
dicen que la decisión es injusta para los productores rurales que cumplieron
estrictamente con las reglas contra la deforestación establecidas antes del nuevo código.
"Para emitir su fallo
del 28 de febrero, los magistrados tomaron en cuenta los intereses económicos
en lugar de las evidencias científicas, e incluso uno de los magistrados llegó
a afirmar que la ciencia no debía ser considerada en el proceso ya que es una
‘actividad de conjeturas’", reseñó a SciDev.Net el agrónomo José Antônio Aleixo
da Silva, del Departamento de Ciencias Forestales de la Universidad Federal
Rural de Pernambuco.
"Además, la amnistía
por crímenes ambientales impedirá restaurar alrededor de 41 millones de
hectáreas forestales", denuncia a SciDev.Net.
El juicio comenzó en
septiembre de 2017, después de que la Procuraduría General de la República
presentara una serie de acciones cuestionando la constitucionalidad de 23
artículos del nuevo Código Forestal que, a su juicio, implicaban grave riesgo
para la conservación ambiental.
El fallo también
oficializa reducir de 80 a 50 por ciento el tamaño de las reservas legales en
los estados o ciudades de la región amazónica que tienen más de la mitad
de sus territorios ocupados por reservas indígenas o áreas protegidas.
"La
decisión de la Corte Suprema conducirá a reducciones significativas de las
Áreas de Protección Permanente, y representará una gran pérdida de áreas
ambientalmente sensibles, principalmente en la región amazónica".
José Antônio Aleixo da Silva, Universidad Federal
Rural de Pernambuco
La decisión permite asimismo reducir el
tamaño de las Áreas de Protección Permanente (APA), que se extienden por todo
el país, algunas en cabeceras de cuencas, otras en lugares estratégicos para la
agroindustria, junto a lagos o ríos, y que son fundamentales para mantener el
suministro de agua y evitar desastres climáticos como inundaciones y
deslizamientos de lodo.
Debido a la decisión del alto tribunal, los
propietarios que desbrozaron ilegalmente las APA podrán obtener autorización
para desbrozar un 30 por ciento más de tierra. Además permite actividades
agrícolas en laderas empinadas y cimas de colinas, lo cual es nocivo porque
puede desencadenar la erosión del suelo.
"La decisión de la Corte Suprema conducirá
a reducciones significativas de las APA, y representará una gran pérdida de
áreas ambientalmente sensibles, principalmente en la región amazónica",
advierte da Silva.
El fallo del tribunal se dio a pesar de que
la Sociedad Brasileña para el Avance de la Ciencia y la Academia Brasileña de
Ciencias enviaron una carta con argumentos técnicos y científicos para apoyar
el análisis de los magistrados.
El biólogo Sérgius
Gandolfi, de la Escuela de Agricultura Luiz de Queiroz de la Universidad de São
Paulo (Esalq-USP), señala que se trata de una decisión equivocada con graves
consecuencias para la conservación del medio ambiente.
"La Corte Suprema
falló a favor de los poderosos intereses de los agronegocios", refiere
a SciDev.Net. "Perpetuará la degradación ambiental en áreas protegidas,
pues redujo drásticamente las áreas de restauración que ayudarían a revertir la degradación ya existente", destaca el biólogo, quien
participó en los debates que precedieron a la aprobación del nuevo Código
Forestal.
Solo entre agosto de 2016 y julio de 2017
la tasa de deforestación en la selva amazónica brasilera ascendió a 2.834 km2,
un área cuatro veces más grande que Salvador, la principal ciudad de Bahía, al
noreste de Brasil.
Según un estudio publicado en enero de 2018 en la revista Nature
Communications,si se siguen destruyendo los bosques al ritmo actual —de
alrededor de 7 mil km² por año en el caso de la Amazonía—, en tres o cuatro
décadas habrá una gran pérdida acumulada, lo que intensificará el proceso de calentamiento del planeta, independientemente de los esfuerzos que se
hagan para disminuir las emisiones de gases de efecto invernadero.
Para Gandolfi, es necesario retomar el
Código Forestal anterior, que obligaba a recuperar mayor cantidad de selva. Eso
también permitiría una mayor y más pronta reducción de las emisiones, además de
que, concretamente, se salvarían ríos, lagunas y manglares, entre otros
ecosistemas.
Casi el 90 por ciento de los canales
fluviales de Brasil tienen menos de 10 metros de ancho.
Para esas áreas, la
legislación anterior, que data de 1965, contemplaba una franja de protección de
la vegetación ribereña de 30 metros en cada orilla, para proteger los
riachuelos.
"El código actual permite una reducción de
la banda de protección de acuerdo con el tamaño de la propiedad, que puede
llegar a ser de tan sólo cinco metros", señala.
"Desde el punto de
vista ambiental, es imposible tener una percepción optimista del fallo",
comenta a SciDev.Net Roberta del Giudice, secretaria ejecutiva del Observatorio
del Código Forestal.
"Aunque los magistrados pusieron énfasis en
los principios constitucionales que salvaguardan la protección ambiental, las
decisiones que tomaron favorecen la reducción de la protección que existía
previamente en la ley", destaca.
Ahora, científicos y ambientalistas tendrán
un arduo trabajo para aplicar la nueva legislación, pues el nuevo Código
Forestal presenta una serie de desafíos de implementación, tales como las
amplias áreas que se restaurarán y compensarán.
En São Paulo,
investigadores del Esalq-USP han iniciado un proyecto que generará mapas, datos cuantitativos y otro
tipo de información para apoyar la implementación del programa de recuperación
ambiental del estado, de acuerdo con los requisitos del nuevo Código Forestal.
"Ya hemos generado mapas e información
sobre cómo serán cubiertas la vegetación y las áreas de producción agrícola en
20 años, cuando el programa de recuperación ambiental del estado se consolide
por completo", dijo el agrónomo Ger Sparovek, de Esalq-USP.
"La comunidad científica cumple un rol
fundamental en la generación de datos y en proteger los bosques, traduciendo
sus estudios para que la sociedad, los parlamentarios y el poder judicial
comprendan mejor el tema", añade Roberta del Giudice.
> Enlace al
estudio de FAPESP
El proyecto de la Esalq-USP y el estudio
publicado en Nature Communications son financiados por FAPESP, uno de los
donantes de SciDev.Net.